
Debo de admitir algunas sorpresas agradables, una de ellas la cantidad enorme de amigos militantes de política que coincidí en volver a ver, y el cariño que le depara la gente al Ex Presidente y a su esposa, siempre hay algo desagradable como el observar las viejas caras de muchos batracios que ya se saben en que andan y ya conocemos su croar retórico y repetitivo.
Al retirarme del evento con tres amigos de la ciudad de la Ceiba (Dr. Rigoberto Tabora, la educadora Johana Valeriano y el educador Carlos Hernández), y uno de San Pedro Sula (Dr. Samuel Santos), decidimos cenar y comentar las particularidades del evento.
Me llamó la atención la expresión efectuada por el Dr. Rigoberto Tabora, al manifestar:
“Que en toda Honduras existe una Resistencia Silenciosa, y que el pueblo tiene Sed de Revancha”
A partir de la apreciación el Dr. Samuel Santos y todos los de la mesa nos preguntamos:
¿Existirá tal Resistencia Silenciosa?
¿De que esta compuesta la manifestación política de esa Resistencia Silenciosa?
¿Qué hará el Partido Libre y el FNRP de cara a canalizar la simpatía de esa resistencia silenciosa y de esa supuesta sed de revancha?
Si somos cuidadosos, y vemos el comportamiento antropológico-social de la sociedad hondureña, compuesta por los extremos de falta de formación política, educación, identidad nacional, memoria histórica colectiva, y con un malinchismo tránsfuga, donde los mismos grupos aparecen en las mismas reuniones políticas, y fácil de manipular por los grandes medios corporativos, tengo muchas dudas sobre la existencia de la “Resistencia Silenciosa, con deseos de revancha” y que esta misma exista como caudal político, para asumir el poder.
¿Tendrá la capacidad el Partido LIBRE y el FNRP, de transformar el supuesto deseo de revancha, en una convicción política firme de propuesta, para cambiar las viejas estructuras de Honduras?
La presencia del Ex Presidente y su esposa el día de ayer, me causa dos apreciaciones:
La primera; no discuto su liderazgo y el aprecio del colectivo en resistencia a su persona y a su esposa.
La segunda; es si el Ex Presidente y su esposa, lograrán el desdoble político para encausar ese colectivo de manera firme al proceso de transformación de Honduras, y convencer a la supuesta resistencia silenciosa con deseos de revancha para que participe y aporte, sin que la presencia del Ex Presidente opaque a su esposa como conductora para asumir el poder.
“He allí el grave problema y un reto a resolver”
Carlos Augusto Hernández Alvarado
Abogado y Notario
carlosaugusto69@yahoo.com
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