En la ciudad de Tijuana, hay la pretensión de defenestrar un parque, uno de los pocos que tiene la ciudad. Posee cerca de mil árboles, arbustos, pasto, banquetas y un edificio donde se alojan instalaciones como una biblioteca y recientemente remodelado con una inversión –me dicen- de cien millones de pesos. Ágoras con el monumento a (Benito) Juárez, a La Madre y al del Policía Caído que ya no existe porque lo acaban de “tumbar”, ahora sí, está “bien caído”.
Un grupo de “notables” de la usura, se han dado cita para crear la idea de hacer estacionamientos, centro comercial y un zócalo arriba de todo esto. Para ello hay que pasar por encima de lo ajeno que es el Parque Central perteneciente a los ciudadanos de la adolorida ciudad de Tijuana. ¡Chingón!
Hoy se reunieron los “notables” y empresarios para aviesos propósitos liderados por la insulsa hija del Dr. Aubanel.
““Creemos que es una necesidad (¿Para quién?), no es un lujo”, opinó De la Parra como miembro del Patronato (“de notables”) 11 de Julio, el cual también lo integra el arzobispo de Tijuana, Rafael Romo Muñoz” nos dice Jorge Morales Almada en su articulo; Gasto millonario del gobierno… ¿para un zócalo?
Heberto Peterson Legrad de CETyS Universidad en su articulo “Juan Pablo II y la ecología” refiere a Carol Wojtyla; “La paz mundial está amenazada, además de la carrera armamentista, por las injusticias existentes, por la falta del debido respeto a la naturaleza, la explotación desordenada de sus recursos y el deterioro progresivo de la calidad de vida” y agrega Peterson (de él); “ya no es sólo la guerra el foco de atención, puesto que en época de paz, también estamos destruyendo nuestro hábitat natural”.
“Las razones de producción prevalecen a menudo sobre la dignidad del trabajador, y los intereses económicos se anteponen al bien de cada persona o incluso al de poblaciones enteras (…) la contaminación o la destrucción del ambiente son futuro de la visión reductiva y antinatural, que configura a veces un verdadero y propio desprecio del hombre”. Lo anterior del documento “Paz con Dios Creador, paz con toda la creación” de Juan Pablo II y que Peterson en su artículo nos invita a leer y sigue:
Es injusto que pocos privilegiados sigan acumulando bienes superfluos, despilfarrando los recursos disponibles, creando una gran multitud de personas que viven en condiciones de miseria, en el mas bajo nivel de supervivencia (…) corresponde a cada Estado, (…) la función de prevenir el deterioro de la atmosfera y de la biosfera (…) ofreciendo a los propios ciudadanos las garantías de no verse expuestos a agentes contaminantes (…) la gravedad de la situación ecológica demuestra cuan profunda es la crisis moral del hombre . Si falta el sentido del valor de la persona y de la vida humana, aumenta el desinterés por los demás y por la tierra.
Y concluye Petereson con sus palabras; “los problemas ecológicos nos deben solidarizar para juntos, (…) luchar por rescatar un mundo mas digno para las siguientes generaciones –nuestros hijos- ante quienes tenemos una gran responsabilidad y de la cual daremos cuenta”
El artero “proyecto zócalo” se dice costará –si los tijuaneses lo permitimos- 900 millones de pesos, cantidad que supera los 220.3 millones que el gobierno del estado invierte en obra publica para Tijuana ( 2009), y (Jorge) Morales nos da una lista de obras –información de la Dirección de Inversión Pública en el estado- que se pudieran hacer en vez de éste proyecto inútil y de vanidad por demás enteleque ( y de interés para unos pocos: empresarios, notables, la iglesia y los pandilleros);
Obras que pudieran realizarse: Distribuidor Morelos –Santa Fe, Segundo acceso a Playas, boulevard Casa Blanca, White topping vía lenta poniente, Modernizar carretera a Rosarito, Canalización arroyo el Alamar, Centro de Cultura de la Legalidad, Canchas en el Parque Azteca, Hospital de la Mujer y el Niño, Servicios de Salud, UABC en el Valle de Las Palmas, Rectoría en la Universidad Tecnológica de Tijuana, césped y canchas de fut-bol para los campos deportivos en Otay.
Catorce obras públicas de beneficio para la población concluye Morales Almada contra una de interés de aquellos; “su zócalo”. $900 millones versus $220 millones ¿ve usted amable lector la diferencia?
Santo Tomas de Aquino nos define sobre Ley Moral; “Es una Ordenación de la Razón, promulgada para el bien común por quien tiene el cuidado de la comunidad”. Y en efecto una ley es una orden, mandato; “ordenación”.
Invocando a la Ley General de Bienes del Estado de Baja California que amparan nuestros derechos colectivos:
Artículo 16.- Los bienes de dominio público podrán ser enajenados, previo Decreto de desincorporación que expida la Legislatura del Estado, cuando por algún motivo dejen de servir para el fin respectivo.
Igualmente la ley tantas veces manoseada y ojeada en este capítulo de agravios, define en forma amplia pero no limitativa cuales bienes son del uso común y los que señala de la manera siguiente:
Artículo 17.- Son bienes de uso común:
I.- II.- Las plazas, paseos y parques públicos construidos o adquiridos por el Gobierno del Estado o cuya conservación esté a su cargo. III, IV.
Artículo 18.- De los bienes de uso común pueden usar todos los habitantes del Estado, con solo las restricciones establecidas por la Ley y Reglamentos administrativos, pero para aprovechamientos especiales se necesita concesión otorgada con los requisitos que fijen las Leyes los que por ningún motivo desvirtuarán la naturaleza del bien en tal forma que los aprovechamientos especiales no hagan nugatorio el uso común.
Artículo 43(…) parques, jardines y escuelas no podrá dárseles un destino distinto .
Los Notarios Públicos incurrirán en responsabilidad si autorizan escrituras que en alguna forma violen esta disposición.
Artículo 33.- (…) Los vecinos del municipio, tienen el derecho de gestión y participación en los asuntos públicos del municipio (…).
Deseo resaltar carísimo lector, que el meollo vero del problema que nos tiene en ésta alfaguara no es precisamente de carácter inteligente y de sabiduría; “El área proyectada para este zócalo es el espacio entre las sedes de los gobiernos municipal y estatal (…) donde también se planea la construcción de la nueva catedral Metropolitana”. Así rezan los corifeos y “notables” representantes del dinero, empero, tal catedral inició su proyecto desde hace años, mucho antes a los gobiernos actuales; es claro que el Estado Vaticano ejerce sus poderes omnímodos sobre el Estado Mexicano; el primero lo representa Romo Muñoz para éste negocio de millones de dólares; la catedral. Al segundo lo representa el gerente en turno del municipio con residencia en San Diego Jorge Ramos. “(…) ni siquiera vale una misa ya que lo que subyace es el afán de lucro, las ambiciones personales de un grupo de supuestos notables, montados en la modernidad”, enAsimetrías Pendientes, Rafael Olivera así lo expresa.
Si de respeto a los Derecho de la Humanidad, leyes y valores morales se tratara la decisión de fenecer un parque por una suntuosa catedral-zócalo no estaría en discusión sin embargoJuan Pablo II es muy claro; es injusto que pocos privilegiados sigan acumulando bienes superfluos, despilfarrando los recursos disponibles. Peterson es contundente: estamos destruyendo nuestro hábitat natural. Morales Almada; Gasto millonario del gobierno… ¿para un zócalo? y cito nuestras leyes y donde Santo Tomas de Aquino nos define la Ley como orden de la Razón empero, para la cultura de los neoliberales se funda en otros valores: el individualismo, la propiedad privada y la explotación de la naturaleza y del hombre por el hombre como algo natural y legítimo.
En el articulo de triple doble u. jasonberryauthor.com “El dinero detrás de la influencia vaticana de Maciel” entre otros; “Ese apoyo papal le daba a Maciel la credibilidad para moverse con soltura entre los súper ricos. El mismo 2004, en un acto para recaudar fondos, un camarógrafo lo detectó pasándole los dedos por la solapa al smoking de Carlos Slim, uno de sus principales patrocinadores. Además de los donativos, las escuelas legionarias con altas colegiaturas y bajos salarios subsidiaban las operaciones romanas, dicen fuentes cercanas a las finanzas de la Orden”.
Cada cripta tiene un costo de $8000.00 dólares y “el dinero detrás de la influencia vaticana”. El Estado (fallido) mexicano y los “notables” ponen el zócalo enteleque, con ello “compran” indulgencias plenarias “entrada libre al paraíso”; no pagaran cuentas por sus pecados de infidencia ni por uso de la mentira como forma, y por fondo la impunidad; castica polidactilia. El pueblo “pone” El Parque Central.
Si resucitara Miguel Hidalgo y Costilla volvía alborotar; Abrid los ojos Americanos (…) ellos no son católicos sino por política. Su Dios es el dinero.
Silverio de la Mora. Abril / 07 / 2010
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